(publico.es) «Este autobús está secuestrado». El 7 de mayo de 1978 Manolo Vital se subió al autobús que había conducido durante decenios, el 47, y lo llevó, saliéndose de su ruta, a lo alto de la colina de Torre Baró. Fue la manera de demostrar a los políticos locales que el transporte público, en contra de lo que ellos defendían, sí podía llegar a este barrio, que lo necesitaba. Ahora, Eduard Fernández recupera la figura de este hombre y la importancia de los movimientos vecinales y obreros en El 47, la nueva película de Marcel Barrena.

En pleno debate sobre la migración, con las voces de la ultraderecha de Vox y del PP resonando en su intolerancia, esta película recuerda que todos somos hijos de emigrantes, desplazados o refugiados, centrándose en la historia de extremeños y andaluces que llegaron al extrarradio de las grandes ciudades buscando una vida mejor. Construyeron sus casas con sus propias manos y lucharon como colectivo por la dignidad vecinal.

Tras Mediterráneo, donde se mostraba la travesía por mar de los refugiados y la labor que hace Open Arms, Barrena repite con Eduard Fernández y ambos con un cine social que aboga por la solidaridad, el humanismo y que reivindica la memoria de los asesinados y represaliados en la guerra civil.  (Leer más)