Aunque nos escandalicen, los bombardeos sobre civiles en grandes ciudades ya no nos sorprenden. En los últimos años, ha sido habitual ver ataques sobre Damasco (Siria), Kiev (Ucrania) o Gaza (Franja de Gaza, Estado de Palestina), los principales enclaves de las guerras mediáticas más recientes.

En 1936 no era, ni mucho menos, la norma. Algunos países occidentales habían descargado munición sobre sus territorios colonizados, e incluso durante la Gran Guerra importantes capitales europeas fueron severamente castigadas desde el aire, pero no es hasta la Guerra Civil Española cuando se produce el primer bombardeo sistemático sobre una gran ciudad, Madrid, todavía en manos de la República. Según el término acuñado por el escritor Michael Moorcock en 1963, habría sido el primer «urbicidio» de la historia.

n 2019 los arquitectos Enrique Bordes y Luis de Sobrón emprendieron la inconmensurable tarea de localizar los siniestros en la capital desde 1936 hasta 1939. Los profesores de la Universidad Politécnica y de la Escuela de Arquitectos de Madrid elaboraron un plano, publicado entonces por el Ayuntamiento, que recogía aproximadamente 1.600 impactos de artillería, pero el dato se elevó dos años más tarde, con el lanzamiento del libro Madrid bombardeado. Cartografía de la destrucción 1936-1939 que acompañaba al mapa, hasta 2.203. (ELESPANOL.ES) (LEER MÁS)